Incluso la flor más fuerte puede comenzar a marchitarse si dejas de regarla un día, dos... Incluso tres días. Pero al cuarto... Al cuarto día esa flor dejará de "ser", dejará de intentar luchar por sobrevivir, porque ya no tendrá sentido que siga "siendo" cuando sabe que ni siquiera al quinto día la volverán a regar.
Las amistades deben ser cuidadas cada día con pequeños detalles porque si un día dejas de cuidarlas, cuando quieras darte cuenta, no será más que una amistad marchita.
Será algo que dejó de "ser" hace tiempo.
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